La gran mayoría de los problemas de espalda, suelen ser leves y transitorios por lo que no requieren una intervención quirúrgica.
Sin embargo, en ciertas patologías de la columna vertebral, la cirugía es una opción que puede mejorar significativamente la vida de los pacientes.
Entonces, ¿cuándo es necesaria?
En muchos casos, el dolor de espalda, el dolor lumbar o cervical puede tratarse con fisioterapia, medicamentos y cambios en el estilo de vida. Pero cuando estas terapias no alivian los síntomas y la calidad de vida del paciente se ve gravemente afectada, la cirugía puede ser la mejor solución.
Condiciones como hernias discales, escoliosis severa, espondilolistesis y estenosis de canal son algunas de las patologías que pueden requerir cirugía. Por ejemplo, si una hernia discal causa compresión nerviosa con pérdida de fuerza, sensibilidad o dolor incapacitante (cíatica), una intervención para retirar el fragmento desplazado podría ser necesaria.
Para que una cirugía de columna ofrezca buenos resultados al paciente, además de una cirugía con una técnica refinada, es muy importante ser certeros en las indicaciones. Es decir, la causa de dolor debe ser clara, tiene que tener un diagnóstico preciso y tiene que haber un respaldo de la evidencia científica que una cirugía puede mejorar la vida del paciente. Los estudios demuestran que el dolor en la columna de origen poco claro un tratamiento quirúrgico no es mejor que tratamientos sin cirugía, sometiendo al paciente innecesariamente a los riesgos de la cirugía.
En Zaragoza, contamos con especialistas altamente capacitados para evaluar cada caso y ofrecer soluciones personalizadas. La cirugía de columna es un procedimiento complejo, pero en manos expertas, los riesgos son mínimos y los beneficios pueden ser significativos.
Si tienes dolor lumbar o cervical que no mejora con tratamientos conservadores,
consulta con un especialista en cirugía de columna en Zaragoza para evaluar tus
opciones.